Un joven con discapacidad fue liberado de la jaula en la que lo mantenía encerrado su padre, temeroso de que se alejara del lugar “y ante la imposibilidad de comprarle una silla de ruedas”, según manifestó el progenitor.

Richard Valdéz, de 18 años de edad, no camina ni habla. Apenas gatea. Ante el temor de que se alejara de su domicilio, su padre lo encerró en una jaula de metal. Cuando se presentó la denuncia anónima en el distrito de Santiago, el Ministerio Público concurrió al lugar y ordenó su inmediata liberación y posterior internación bajo mejores condiciones.

El caso ocurrió en el pueblo de San Ramón del distrito de Santiago (departamento de Misiones), en el centro de Paraguay.