Luego de casi tres meses del repentino fallecimiento del afamado actor estadounidense Robin Williams, se dieron a conocer los resultados del informe forense, donde se anunció que su muerte fue causada por asfixia y ahogamiento.

Los informes toxicológicos, que se le realizaron como procesos de la autopsia, revelaron que dentro del organismo del cómico actor se encontraron sustancias como antidepresivos, cafeína y levopoda, un fármaco utilizado para tratar la enfermedad de Parkinson.

Además, en el sitio donde fue hallado su cuerpo, se vio una botella cerrada de un fármaco utilizado para tratar la esquizofrenia, trastornos bipolares y depresión.

Se presume que antes de suicidarse ahorcándose con un cinturón, el actor había intentado quitarse la vida cortándose las venas con una navaja de bolsillo, esto luego de haber encontrado en el baño una tela húmeda con una sustancia color rojizo, que sería sangre.

El informe también señala que la última llamada que se hizo desde su teléfono fue a las 19.00 horas de la noche antes de morir, fue a su esposa y duró sólo 38 segundos. Su mujer, en ese momento dijo que lo notó bien.

Al momento de morir, Williams estaba recibiendo un tratamiento para la depresión severa y estaba padeciendo Parkinson.

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