Los malos hábitos alimenticios causarían una tendencia creciente en los niveles de anemia en las zonas urbanas del país; a diferencia de las áreas rurales, donde se observa una disminución de ese problema, señaló la ministra de Salud, Midori de Habich.

Según manifestó, esto obedecería a que en las zonas urbanas la vida familiar es más difícil, porque la mayoría tiene que salir a trabajar, por lo tanto se come fuera y de manera poco saludable.

“Es un fenómeno muy interesante, porque, increíblemente, a mayores ingresos y condiciones económicas, no necesariamente viene la mejor nutrición, y en eso tenemos que actuar rápido y fuerte en la promoción de los hábitos saludables”, comentó la titular del sector.

Agregó que esa situación hace pensar al sector en extender la entrega de micronutrientes en las zonas urbanas del país.

“Sólo el indicador pobreza resulta insuficiente cuando vemos este fenómeno y nos hace repensar los alcances de nuestras políticas. La relación entre anemia y pobreza ya no es muy clara”, dijo.

Fuente: Andina