Explicó que OSIPTEL realizó una evaluación del desempeño de los 20 años de concesión de Telefónica Móviles y determinó algunas falencias, limitaciones y defectos del servicio brindado por la empresa operadora, lo que generó que se penalice con dos años una posible renovación.

“Aproximadamente dos años es la penalidad. Si se optara por ir a negociar una posible renovación, necesariamente estamos obligados a atender la recomendación, el resultado de la evaluación de OSIPTEL”, dijo en RPP Noticias.

Paredes reiteró que este mes se tomará una decisión respecto a si se convoca a una nueva licitación o si se renueva el contrato con Movistar. “Anunciaremos cuál alternativa hemos escogido: empezar una negociación o ir a una subasta internacional”, señaló.

Remarcó que si se decide por renovar con la empresa española, se exigirá la mejora de algunos servicios, como cantidad de llamadas interrumpidas, número de reclamos y demora en la atención de los mismos, demora en la atención al público, número de fallas de interconexión, entre otros.