Si un día llegaste al trabajo, y sin darte más explicaciones te indicaron que no puedes entrar porque ya no formas parte de la empresa, pues estás experimentando un despido arbitrario. Así como tú, son muchas las personas que son separadas de su centro laboral sin recibir explicación alguna sobre el por que de la decisión.

Ante situaciones como esta, lo que debes hacer es acudir de inmediato a la comisaría del distrito en que se encuentra ubicada la empresa y dejar constancia del hecho. A partir del momento en que fuiste despedido cuentas además con 30 días de plazo para presentar una demanda ante el Poder Judicial si la empresa se niega a hacer efectivo el pago correspondiente a tu indemnización.

Y es que si trabajabas en base a un contrato indeterminado, la compañía está obligada a pagarte un sueldo y medio por cada año de trabajo que has cumplido con ellos. En cambio, si se trataba de un contrato a plazo fijo que ha sido interrumpido antes de la fecha de término, deberás recibir el pago de un mes y medio por cada mes que falte para finalizar el contrato.

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No olvides que en ambos casos el tope que puedes recibir de pago como parte de la indemnización es de 12 remuneraciones como máximo.

Pero comenzar un juicio es un proceso que puede demorar hasta dos años, por lo que una recomendación de los expertos es que busques llegar a un acuerdo con la empresa en la que trabajaste.

Además, si ganas el proceso, tienes todo el derecho a solicitar la devolución de todo el dinero invertido en el juicio.

Fuente: Plusempresarial.com

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