El gobierno de Argentina emplazó el sábado a uno de sus principales detractores en la prensa, el Grupo Clarín, a que venda la mayoría de sus estaciones emisoras, y afirmó que el 7 de diciembre marcará el día en que los monopolios de medios de comunicación ya no podrán estar por encima de la ley.

El Grupo Clarín, dueño de 240 sistemas de cable, 10 estaciones de radio y cuatro canales de televisión además de su diario insignia, recurrió las cláusulas antimonopolio de la ley de medios por considerarlas inconstitucionales. La ley de medios fue aprobada en 2009 y limita el número de licencias que puede poseer una empresa.

Clarín, detractor implacable de la presidenta Cristina Fernández, señaló que muchos juristas apoyan la posición del grupo de medios, de que incluso si el 7 de diciembre expirara la medida cautelar a su favor tendría un año más para activar un plan de desinversión, mientras espera recibir un posible fallo favorable.

En un mensaje televisivo que comenzó a transmitirse durante los partidos sabatinos de fútbol, que atraen gran auditorio, el gobierno llamó la fecha límite como “7D” y señaló que ese día llegará la “diversidad” y la “democracia” a los medios de comunicación en Argentina.

El medio respondió de inmediato con su propio anuncio, en el que acusó al gobierno de intentar una maniobra ilegal y señaló que la propia ley de medios establece un plazo de un año a partir del 7 de diciembre para resolver la demanda de inconstitucionalidad.

Fuente: DPA