Un padre camboyano furioso castigó a su hijo de 13 años por faltar a la escuela para jugar en internet. El castigo elegido fue encadenarlo a un poste de línea eléctrica.
El mototaxista Thoeun Sok, de 40 años, encontró a su hijo en un cibercafé en la norteña ciudad de Battambang, jugando juegos en línea, cuando debería haber estado en clase.
Thoeun estaba indignado por lo que decidió “darle a su hijo una lección”, humillándolo públicamente: lo encadenó por el cuello a un grueso poste de línea eléctrica de madera.
El padre ahora es buscado por cargos de abuso de menores. A las dos horas de estar encadenado, los vecinos alertaron a la policía que trajo a un cerrajero para liberar al niño.
“Este tipo de tortura no es aceptable”, dijo el jefe de la estación de policía.
Fuente: Contexto de Argentina