Las autoridades de Filipinas elevaron a 51 el número de muertos y hasta 25 el de desaparecidos tras el paso de la tormenta tropical Nock-ten por el norte del archipiélago.

El Centro Nacional para la Prevención de Desastres indicó que las inundaciones y corrimientos de tierra han desplazado a unas 700 mil personas en diferentes provincias de la isla de Luzón, sobre todo en la de Bicol, situada al sur.

La mayoría de víctimas han fallecido ahogadas, sepultadas por desprendimientos de tierra, electrocutadas o golpeadas por postes o árboles derribados por el vendaval, informó Efe.

Según las primeras estimaciones oficiales, la fuerte tormenta ha causado daños materiales por valor de mil 460 millones de pesos (34 millones de dólares). La mayor parte de las personas dadas por desaparecidas son tripulantes de barcos de pesca que faenaban.