Dos niños de 11 y 12 años de edad, que fumaban a escondidas, causaron un incendio y la destrucción de un castillo gótico del siglo XIV en Eslovaquia.

Los menores arrojaron sin medir las consecuencias las colillas aún encendidas a unas hierbas secas, informa El Mundo en su portal de internet.

Estas prendieron inmediatamente y pronto se propagaron hasta destruir por completo el tejado, la zona de exposición y el campanario de la fortaleza medieval.

Los 82 bomberos desplegados para sofocar el incendio aseguraron que, afortunadamente, no había visitantes en su interior del castillo cuando las llamas se extendieron al techo de madera.

La construcción devorada por las llamas es el gran castillo gótico Krasna Horka, situado cerca de Roznava, en el este de Eslovaquia. El Ministerio de Cultura del país ha calificado los daños de graves, aunque no ha dado cifras sobre el dinero que costará la recuperación del monumento.

El castillo Krasna Horka fue reconocido en 1961 como patrimonio nacional cultural de Eslovaquia por la Unesco. En abril del 2011 fue abierto al público tras su restauración.