Una niña decidió acudir al médico en porque comenzó a llorar lágrimas de sangre sin razón alguna. Lo que los galenos descubrieron llamó mucho la atención.

Según el “Daily Mail”, los médicos que trataron el extraño caso de la niña de 11 años, que lloraba sangre, se sorprendieron al encontrar un lente de contacto rígido que se había alojado en su ojo durante dos años.

Inicialmente la menor y su madre acudieron porque tenía una , un problema común en el que se forma un abultamiento debido a una glándula bloqueada de aceite.

A la joven paciente se le dio antibióticos y fue enviada a casa, pero por la mañana del día siguiente se horrorizó cuando comenzó a llorar lágrimas manchadas de sangre.

¿Cómo dieron con el lente de contacto?

La niña fue derivada a un oftalmólogo y fue sometida a tomografías computarizadas, según los médicos que describen su caso en la revista . Las imágenes revelaron una lesión en la parte superior de su ojo derecho.

Debido a esto, los médicos creían que podría tener un gran quiste en la parte superior de su ojo, lo cual afectaría la visión. De vuelta en la oficina del oftalmólogo, este decidió revisar bien su ojo para obtener una mejor visión de la lesión.

Para sorpresa de todos, un lente de contacto salió de manera espontánea. Fue entonces que la madre de la niña de 11 años recordó que había perdido uno hace dos años y el cual usaba para mejorar su visión.

En la revista BMJ Case Reports, los médicos dijeron que es difícil de diagnosticar un lente de contacto perdido en los niños, ya que no son capaces de dar una historia detallada y son más difíciles de examinar.

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