Tres personas murieron en los enfrentamientos entre la policía y los manifestantes que piden la dimisión del presidente ucraniano, Viktor Yanukovych, que alcanzaron su nivel más alto de violencia desde que empezaron en noviembre.

Las protestas se desencadenaron después de que el gobierno llegara a un acuerdo con Moscú, que los manifestantes vieron como un alejamiento de la Unión Europea.

En los últimos días entraron en vigor nuevas leyes que limitan el derecho de protesta. Sin embargo, el número de personas en las calles no disminuyó.

Las calles del centro de Kiev están cubiertas de humo de los neumáticos quemados por los manifestantes antigubernamentales, así como por los gases lacrimógenos empleados por la policía antidisturbios para dispersar a los opositores que desde el domingo se enfrentan a las fuerzas del orden.

Mientras, el presidente ucraniano, Viktor Yanukóvich, y los miembros del grupo de trabajo creado para tratar de buscar una solución a la crisis política que sacude el país, se reunieron esta tarde con los líderes de los principales partidos de la oposición, según informó la oficina presidencial.

Fuente: BBC/EFE