Cuando pase el fervor de la Navidad, la atención de los peruanos se centra en el Año Nuevo 2018 y a las celebraciones y tradiciones de esta especial fecha. Por ejemplo, una de las costumbres es quemar un muñeco a modo simbólico de queja y varias piñatas, con el rostro de conocidos políticos, ya se venden en el Cercado de Lima.