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Para no despertar sospechas, el asesino tenía guardado un fotocheck en el que indicaba que trabajaba en un banco, y de ese modo logró que la mujer, le abra la puerta de su domicilio.
Crisóstomo Quispe, fue trasladada inmediatamente al hospital materno infantil, José Carlos Mariátegui, pero los esfuerzos por mantenerla con vida fueron en vanos.
El próximo 14 de diciembre la mujer se iba a casar con su pareja, con la que llevaba varios años de relación, según informó América Noticias.
La Policía investiga sobre una llamada misteriosa, que recibió la víctima, minutos antes de ser asesinada.
