Enterada del traslado de cuatro terroristas a Piedras Gordas, para hacerle espacio al hermano del presidente Ollanta Humala, en la Base Naval, la subversiva Elena Iparraguirre presentó un hábeas corpus para solicitar que su esposo, el cabecilla de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán, también sea llevado a una prisión común.

La interna del penal de Chorrillos, en una carta, alega que Guzmán, quien causó un baño de sangre durante dos décadas en Perú, por lo que fue sentenciado a cadena perpetua, cumple su condena hace casi 20 años “en condiciones de aislamiento absoluto que flagrantemente violan todos los días sus derechos fundamentales pues se le niega la visita familiar.

Agrega que con el traslado de los terroristas Víctor Polay, Miguel Rincón, Peter Cárdenas y Óscar Ramírez Durand, ‘Feliciano’, “la situación de aislamiento absoluto en que se encuentra mi esposo se profundiza”, y sostuvo que no sacarlo de ese penal sería un “claro acto de discriminación política.

Fuente: Perú.21