Para evitar una nueva posible fuga, Carlos Timaná fue trasladado del penal Piedras Gordas I, en Ancón, al centro de reclusión de Challapalca, en Puno. Junto a ellos, otros 50 delincuentes de alta peligrosidad.

Según reveló Panorama, Timaná Copará había planificado fugarse del penal y también preparó también la huída de su pareja, Luz Bella Cruz, de la cárcel de Santa Mónica. Sus planes quedaron desbaratados.

El intento de fuga de Timaná quedó al descubierto por las autoridades a través de las cartas que le escribía a Luz Bella. En ellas le daba indicaciones para que se contacte con sus colaboradores.