Los cadáveres del montañero español desaparecido el domingo en el nevado de Ausangate, en Perú, y de su guía peruano fueron encontrados, tras ser sepultados por una avalancha de nieve.

El jefe del equipo de rescate, Marco Pérez, en comunicación telefónica desde las inmediaciones del nevado de 6.372 metros de altura, dijo que encontró el cuerpo del español Miguel López de Sabando, de 41 años, y de su guía peruano “al pie de la pared del nevado”, localizado en la provincia de Quispicanchi.

Los cuerpos estaban cubiertos de nieve, tal como relató la esposa del desaparecido, Ana María López, a 5.600 metros de altura, “a medio ascenso” del pico nevado, explicó Pérez, presidente de la Asociación Nacional de Guías Profesionales de Alta Montaña en Cusco.

Establecer el lugar donde estaban los cadáveres le tomó aproximadamente siete horas a un equipo de 14 personas, entre las que había un policía de alta montaña, dos guías profesionales, incluido Pérez, y pobladores de la región.