Las fuerzas del orden intervinieron este jueves un prostíbulo clandestino en el distrito de San Borja, en el preciso instante en el que algunos parroquianos se encontraban manteniendo relaciones sexuales con las meretrices.

En el local, que tenía la fachada de un “sauna”, las mujeres se hacían pasar como masajistas y “cobraban hasta 300 soles por sus servicios”, indicó uno de los agentes policiales.

Asimismo, fueron capturados el dueño del establecimiento, Runsheng Zheng, y el administrador Danilo Pérez, informó Perú 21.