Un joven viajó muerto junto a su novia en un avión durante más de nueve horas, luego de ahogarse en una comida en pleno vuelo, con dirección a Nueva Zelanda.

Robert Rippingale murió después de que un trozo de carne se alojara en la garganta. Su novia Vanessa Preechakul, de 27 años, dijo inicialmente que confundió su ahogo con risa.

“Al principio pensé que se estaba riendo mirando la película durante el vuelo. Luego me miró a la cara y los ojos estaban en blanco y no podía hablar. En un momento estábamos sentados uno al lado del otro besándonos, tomados de la mano y al minuto siguiente se estaba ahogando”, indicó Preechakul.

Un médico y dos enfermeras en el vuelo de la aerolínea Jetstar de Singapur a Auckland, lucharon para salvar la vida del hombre, pero fue declarado muerto 90 minutos después de iniciar el viaje de 11 horas, informó The Sun.

Los asistentes de vuelo trasladaron su cuerpo a un área de descanso de la tripulación con cortinas, pero su novia Vanessa pidió sentarse junto a él durante el resto del viaje.