A casi un año de su lanzamiento, Pensión 65 , el programa social bandera del presidente Ollanta Humala y que está dirigido a los adultos mayores, es manejado sin un adecuado control en el interior del país, según una grave denuncia hecha por el programa ‘Cuarto Poder’.

Según reveló el informe, y que publica el ‘Diario16’, habría serias fallas en la lista de beneficiarios del programa social, pues algunos inescrupulosos lograron inscribirse en la lista de beneficiarios sin ser “pobres extremos”, perjudicando a aquellos que realmente necesitan una ayuda económica.

El programa indicó que ancianos que son dueños de parcelas, de negocios, de casas de material noble y que disfrutan de varias comodidades: casa, agua, luz, teléfono y hasta cable, reciben la subvención mensual de S/.125.

En el distrito de Supe, en la provincia limeña de Barranca, 284 adultos mayores se benefician con Pensión 65. Sin embargo, solo el 5% de ellos vive en extrema pobreza en comparación de los ‘suertudos’, quienes reciben la pensión gubernamental gracias a la calificación de la municipalidad de dicha ciudad.

Cabe indicar, son los gobiernos locales los encargados de elaborar la relación de favorecidos mediante sus unidades de focalización de hogares de los posibles beneficiarios de Pensión 65. En el caso de Supe, “Pensión 65 les cayó del cielo este dinero, sin vivir en extrema pobreza”.

En el reportaje, aparecen varios casos más de señores y señoras que tienen taxi, cocinas nuevas y varios otros artefactos, pero que no obstante, reciben Pensión 65.

Un caso irregular es el de Héctor Calderón Trujillo, quien ha sido calificado para recibir la pensión social pese a que tiene, por herencia dos hectáreas de chacra que trabaja y por si fuera poco, este anciano es nada menos que suegro del alcalde de Supe, Julián Nishijima. “Mi yerno no siempre va a ser alcalde y por eso me aseguré”, señaló calderón, quien defiende su derecho a recibir dicho dinero.