En esta cita se conversaron diversos temas, incluido el polémico debate sobre la supuesta concentración de medios de comunicación.

En un inicio, Vargas Llosa se declara estar “a favor de la libertad de expresión” pero no se muestra muy de acuerdo con la compra de EPENSA por parte del Grupo El Comercio.

Para el escritor, la mayoría de control de la información daría un poder al grupo periodístico mayoritario.

El Premio Nobel de literatura consideró que es muy importante que la acción se haga a través del Poder Judicial y sobre “casos concretos”.

Asimismo dijo no ser partidario de políticas tomadas por países como Venezuela defendiendo que “en todos los países democráticos, sin ninguna excepción, hay un control del monopolio empresarial, en todos los campos, y fundamentalmente en el campo de la prensa”.