Para iniciar el nuevo año 2015 con bastante energía y buena vibra miles de personas en el mundo realizan una serie de rituales para lograrlo.

Sin embargo, además de los clásicos rituales para recibir la llegada del 2015, en Perú se suelen realizan el de comer las doce uvas, ponerse truza amarilla, dar la vuelta a la manzana, existen otros que pueden resultar extraños.

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¿Quién pagará los platos rotos? En algunos lugares de Dinamarca se recibirá el 2015 con muchos platos rotos. ¿La razón? Tradicionalmente, los daneses estampan platos contra las puertas de sus seres más queridos.

Al contrario de lo que muchos pensarían, los amigos y familiares ven este gesto como una señal de cariño y también de buenos presagios que les desean para el nuevo año.

Zambullida polar. Los que viven en zonas frías de Canadá, Rusia e incluso de Estados Unidos participan en una ‘sumergida polar’. Durante las vacaciones, la gente se reúne en grupos cerca a lagos y ríos para lanzarse momentos previos a la media noche del 31 de diciembre.

*Estaño para predecir el futuro*​. No pocas personas acuden a donde videntes, expertos en tarot y astrólogos para intentar conocer lo que les deparará el futuro. Pero en Finlandia, esa tradición es extendida y se practica la medianoche del 31 de diciembre.

Se trata de la Valaa tinaa, cuyo significado es “fundir la herradura”. Esta costumbre se basa en fundir estaño y después depositarlo en un vaso de agua. Una vez agregado el contenido en el recipiente, este se solidifica y queda con una forma que hay que interpretar para saber qué traerá el nuevo año a la persona que lo hace.

Una competencia por encontrar novio. Para las solteras de Bielorrusia, el fin de año es el momento adecuado para conseguir un nuevo amor. Las mujeres de ese país Europeo compiten en juegos de habilidad para ver quién será la próxima afortunada en conseguir un novio.

Una de las pruebas consiste en colocar maíz delante de cada mujer y liberar un gallo que camine sobre las féminas. Al final, la ganadora tendrá doble premio: un novio y un fututo prometedor en el 2015.

Amanecer en el cementerio. En la ciudad de Talca, en Chile, es costumbre de los lugareños recibir el nuevo año en los cementerios. Para hacerlo, permanecen sentados en sillas o incluso sobre las tumbas de sus seres queridos. De esta forma, recibirán la protección y los favores serán escuchados desde el ‘más allá’.

Fuente: El Comercio de Ecuador

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