A tan sólo una semana de su cumpleaños, Miley Cyrus ya ultima todos los preparativos para pasar un día auténticamente inolvidable. La estadounidense se ha empeñado en enterrar para siempre a la Hanna Montana que lleva dentro y quiere una fiesta cargada de descontrol y sadomasoquismo.

“Quiere crear una mazmorra con cadenas y látigos, además de luces de fiesta en forma de pene y bailarines de ambos sexos”, refirió una fuente al diario The Sun.

La artista quiere que la temática sexual invada su fiesta, con una ambientación que seguro rozará lo obsceno e indecente.

Además, Miley no tiene ningún inconveniente con invitar a su ex, Liam Hemsworth a la celebración. Hace poco, el actor habló de ella e indicó estar muy contento con el momento que está viviendo, pero evitó dar cualquier declaración sobre su relación.