El cantante tuvo que cancelar un concierto junto a Take That, programado en Copenhague, debido a la intoxicación que sufrió tras comer una langosta. Para compartir su estado de salud con sus fans, publicó en su página oficial una triste fotografía.

“Hola gente. Gracias por sus mensajes y el amor. No estoy completamente fuera de peligro todavía, pero me siento mucho mejor”, escribió el divo para tranquilizar a sus seguidores.

Robbie Williams terminó gravemente intoxicado por comer langosta a la parrilla con ensalada de langosta y alioli de azafrán, lo cual le produjo una fuerte deshidratación.