Luego de haberle rescindido el contrato en el noticiero Buenos Días Perú y tras el lío desatado en Twitter con Jaime Chincha, sumado a esto las múltiples críticas recibidas en su contra, la periodista Claudia Cisneros decidió utilizar su cuenta de Facebook para poner paños fríos al asunto, poner los puntos sombre las íes y responder a sus detractores mediante un comunicado extenso donde detalla las razones de su abrupta salida de Panamericana Televisión.

En las siguientes líneas Cisneros dejó entrever que la tenían muy limitada en muchos aspectos,también aclara que los ‘roses’ que habría tenido anteriormente con los integrantes del ‘equipo’ del citado noticiero, fueron convirtiéndose en una gran brecha que día a día se fue ensanchando. Finalmente, Claudia refiere que no les iba a dar el gusto de renunciar sino por el contrario tendría que sacarla de su cargo.

“El miedo y el servilismo hacia el poder hace que la gente, incluso en la que más confiaste, se transforme o muestre lo peor de sí sometiéndose y pretendiendo “manejar” informaciones a conveniencia comercial-política.

Claudia Cisneros:

Exactamente lo mismo que en la época de Montesinos y precisamente de lo que Montesinos supo usufructuar a favor del gobierno de entonces: débiles, genuflexos, arribistas, miedosos, acomplejados, angurrientos, etc., son el insumo perfecto para someter fácilmente al poder de turno.

Pensar que uno creyó que algunos habían aprendido algo tras esa época oscura. Ahora ya no se necesita siquiera un Montesinos. Solitos, por soberbia, angurria de poder, miedo de él, o simplemente por mantener un “estatus”, algunos de los que se dicen “periodistas” son simples mayordomos… Y encima piensan que ESO es hacer bien su trabajo. Si sus familias supieran en verdad lo que manipulan, tergiversan y mienten por mantener ese “estatus”, qué avergonzadas se sentirían.

Esta vez intenté dar la pelea desde adentro y a contracorriente. Tenía claro que no iba a renunciar y ponérselas fácil. Mi posición discordante les incomodó una y otra vez y, para ser sincera, a mí también me desgastaba. No es fácil ser uno contra tres y estar acotando excesos, exigiendo “el otro lado”, diciendo lo que ellos preferirían que no se diga. “Trabajar en equipo” no significa ser parte de un rebaño monocorde y homogéneo, eso es la negación del verdadero concepto de “equipo”, donde cada cual puede aportar algo distinto. Pero para algunos equipo es simplemente ¨alinearse¨.

No ¨alinearse¨ y estar a contracorriente va generando brechas internas insalvables, pero decidí seguir haciéndolo para que ese espacio no se convirtiera en un libreto monocorde y les advertí que “esta vez yo no renunciaría, que me tendrían que sacar”, y es exactamente lo que hicieron. Pero como alcancé a decirles en la cara: yo, a diferencia de aquellos, duermo tranquila.