Esto será posible, a través de un monitoreo en tiempo real del pulso cardiaco, la geolocalización, la temperatura y la movilidad.

Dicho sistema será capaz de detectar el estado de salud del usuario, con lo que se pretende ofrecer seguridad y tranquilidad a estos y a sus familiares.

El diseño de este brazalete coordinado desde el 2010 por el doctor Benjamín Alejandro Morales Ruiz, del Instituto de Ciencias Nucleares de la UNAM, está basado en el desarrollo de algoritmos matemáticos que son capaces de traducir señales emitidas por el organismo humano en pulsos electrónicos y que a su vez se transmiten por tecnología GPRS o de teléfonos celulares a una plataforma de servicio.

Este brazalete geriátrico, que se considera único en su tipo, requiere de una alta sensibilidad para detectar movilidad, caídas, cambios en la temperatura y el ritmo cardiaco. A través de un sistema de inteligencia artificial, los datos captados se envían a una central que valora la información y la clasifica dependiendo del nivel de alerta.

Una vez emitida la alerta, la información recopilada puede ser utilizada solo para actualizar el expediente médico del usuario o para enviar un mensaje al médico tratante para que decida las acciones a seguir, según informó Salud 180.

Con el proyecto se pretende tener un sistema auxiliar en programas de envejecimiento activo, por lo que está enfocado al cuidado de los adultos mayores y personas en situación de riesgo como son los diabéticos, hipertensos o con cardiopatías congénitas.