Según informes de la agencia estadounidense han habido decenas de casos en donde se han presentado efectos secundarios graves, incluso 13 casos de muertes por no tener en cuenta las indicaciones de los medicamentos.

Según la organización, muchos de los laxantes con fosfato de sodio son vendidos como marcas de tiendas y productos genéricos. Todos estos pueden provocar efectos secundarios graves que incluyen deshidratación o niveles anómalos de electrolitos en la sangre, que pueden conducir a complicaciones renales y hasta la muerte, según informó HealthDay.

En unas revisiones recientes, la Administración de Drogas y Alimentos identificó un total de 54 casos de efectos secundarios asociados con el mal uso oral o rectal de laxantes de fosfato en adultos y niños. Doce adultos y un niño murieron.