La tanda de penales debió definir el tercer semifinalista de la Eurocopa. Alemania e Italia habían empataron a un gol por lado en los 120 minutos reglamentarios y los disparos desde los doce pasos se convertirían en protagonistas.
Graziano Pellè tenía la oportunidad de poner adelante a Italia por una diferencia de dos tantos luego del yerro de Mesut Özil; sin embargo, se confió y también falló su remete.
Curiosamente el delantero Southampton le avisó al portero Neuer que le iba a picar el balón. Y así fue… se la picó a un costado, pero se fue afuera.