En Marsella, un gol en propia meta del defensa Birkir Saevarsson, en el minuto 88, frustró el sueño islandés que ya se veía en octavos, ronda que casi asegura Hungría con el empate (1-1).
Hasta ese instante, la fiesta islandesa era completa, alimentada por otro error, en este caso del “abuelo” del torneo, el meta Gabor Kiraly, que primero despejó mal un balón y luego cometió penalti.
Mientras todo esto sucedía en el campo, los hinchas disfrutaban del partido y alentaban a sus seleccionados de un forma poco antes vista. Cuando transcurría el minuto 14 del partido, las cámaras de televisión los enfocaron justo cuando hacían un competencia de quién aplaudía más a un ritmo realmente espectacular. Debes ver el video para que los disfrutes.