Durante el Panathinaikos vs. Lazio, Seitaridis lanzó un balón mansito hacia su propia portería, si haberse percatado que su golero no estaba en ella.

Menos mal que Panathinaikos logró el empate (1-1) a los 90 minutos gracias a Toché, aunque igual el cuadro griego marcha último en el grupo J con dos puntos.