Llegaron tras doce horas de vuelo, pero al abandonar el aeropuerto de Barajas, ningún compatriota apareció con la clásica pancarta o alguna camiseta de la blanquirroja para recibir a la selección .

La delegación peruana llegó a las 5 de la tarde de España (11 am de Perú) y de inmediato abordaron un bus que los trasladó a Collado Villalba, 20 minutos al norte de Madrid, donde realizarán algunos trabajos en el gimnasio para evitar las consecuencias del cambio horario.

“Esta es una buena oportunidad para mejorar la convivencia, para dejar atrás un pasado que no fue bueno. Tenemos mucho trabajo por hacer. Todavía falta algunos jugadores que quiero tener, pero estoy contento con los que estarán en esta oportunidad”, dijo Sergio Markarián al reportero de Elcomercio.pe.