Cuidar el medio ambiente es tarea de todos, pero existe la idea de que es difícil y no podemos hacer mucho. Sin embargo, desde nuestros hogares podemos hacer algunas acciones simples que tienen un impacto en el cuidado del planeta.
Qué se puede hacer para cuidar el medio ambiente
Ahorra agua
El agua es vida, pero es un recurso escaso que debemos aprender a utilizar con responsabilidad. Cerrar el grifo mientras nos lavamos los dientes, utilizar pocos minutos para bañarnos y no tener la regadera abierta mientras nos enjabonamos son pequeñas acciones que reducirán nuestro consumo del agua y también nuestros bolsillos.
Reutiliza
Intentar arreglar los artefactos antes de botarlos. Es cierto que mucho de los electrodomésticos tienen una vida útil ya programada, pero algunas veces, basta con una sencilla reparación para que puedan seguir funcionando. En el caso de la ropa o juguetes, también puedes probar darle una segunda vida.
Evita el plástico
El plástico es uno de los materiales que más deteriora el medio ambiente y que, sin embargo, está más presente en nuestras vidas. Vemos como continentes de plástico inundan nuestros mares, afectando la vida marina y sabemos que tardan centenares de años para desaparecer. Por ello prefiere utilizar las bolsas de tela, tomatodos para tus bebidas y envases de vidrio en lugar de táperes. En los productos de higiene personal, también hay cada vez más opciones como shampoo y reacondicionadores sólidos, desodorantes en barra o con empaques biodegradables, cepillos de bambú, etc.
Composta
Si te gusta la jardinería, una manera de tener tu propio abono es utilizar tus propios desechos de la cocina. Los residuos orgánicos como cáscaras de verduras o frutas en una maceta, junto con aserrín o cartón y un poco de tierra, son una forma de conseguir abono y evitar que se convierta en la basura que llega a los rellenos sanitarios de donde emanan los gases que producen el calentamiento global.
Usa pilas recargables y desenchufa lo que no utilices
Las pilas o baterías son algunos de los elementos más difíciles de reciclar, por eso mejor opta por aquellas que son recargables. Asimismo, desenchufa los electrodomésticos que no utilices y evita dormido con el celular cargándose. Tu bolsillo te lo agradecerá.