Tiene sólo 4 años de edad, pero su talento es enorme. En una batería profesional en medio de una fería, un pequeño toca con mucha pasión la canción I Hate Myself for Loving You.

Además del gran talento que tiene, su pasión por el rock parece haber nacido con él, ya que mientras toca la canción hace movimientos y gestos que hacen notar que vive lo que hace, al mismo estilo de los mejores bateristas del mundo.