La Bestia, así se conoce a un grupo de ferrocarriles que todos los años llevan a miles de inmigrantes mexicanos y centroamericanos rumbo a Estados Unidos. Estas personas arriesgan sus vidas subiendo a este peligroso tren para poder cumplir su sueño americano.
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Sin embargo, muy pocos inmigrantes saben los peligros a los que se enfrentarán en la búsqueda de ese sueño que puede convertirse en una pesadilla. Dormir está prohibido, ya que el menor descuido puede hacer que una persona caiga y termine mutilado por las ruedas del tren, o en el peor de los casos muerto.
Si bien la mayoría de inmigrantes que osan hacer este peligroso viaje son adultos, hay muchos casos de familias enteras e incluso niños sin acompañantes que esperan en las vías el momento exacto para subir a “La Bestia”.
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En el 2013 Y 2014, miles niños centroamericanos llegaron a Estados Unidos en busca de refugio, debido a la violencia que se vivía en sus países. Muchos de estos menores arriesgaron sus vidas montando este peligroso tren, algunos viajaban acompañados de sus padres, pero otros hacían el viaje solos.
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Pese a su edad, estos menores tuvieron que soportar el intenso frío de la noche y las altas temperaturas durante el día. Aunque en algunos casos se veían beneficiados por Las Patronas, esas mujeres que desinteresadamente otorgan alimentos y agua a los inmigrantes que realizan esta Odisea.
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