El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, padeció en carne propia lo muchos neoyorquinos sufren diariamente con los retrasos de los trenes de la “Gran Manzana”.

La máxima autoridad de la ciudad, quien usualmente utiliza su camioneta para cumplir con su agenda, prefirió tomar el tren pensando que iba a ser más rápido.

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Sin embargo, esto no fue así, ya que De Blasio tuvo que esperar 20 minutos para que llegara un tren que lo llevara desde la alcaldía hasta la Estación Pensilvania.

“Necesitamos un sistema mejor. Esperamos 20 minutos por un tren expreso hasta que escuchamos que había retrasos serios en la línea”, escribió el alcalde en un correo enviado a un reportero del New York Times.

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