The Endless River, el nuevo álbum de Pink Floyd, es instrumental hasta la última canción, Louder than words, canción que reflexiona sobre los 50 años de vida de la banda. La letra está escrita por la esposa de David Gilmour, la escritora Polly Sampson. “Sus palabras realmente hablan de algo acerca de la banda”, dice Gilmour. “Nosotros hablamos mejor a través de los instrumentos musicales”.

El director del videoclip, Po Powell, rodó la mayoría del metraje del vídeo junto a los restos del mar de Aral, en la frontera entre Kazajstán y Uzbekistán. Tuvo la idea cuando vio una imagen de barcos oxidados sobre la arena donde el río solía fluir. “Una imagen surrealista, si he visto una alguna vez”, dice Powell, “un ejemplo chocante de las malas gestiones del ser humano y uno de los peores desastres medioambientales del planeta… el río ha menguado en un 10 por ciento de su tamaño original, destruyendo la industria pesquera y pueblos pesqueros por completo”.

La remota localización dio un rodaje muy desafiante. “Es una jornada de unas 18 horas”, dice Powell. “Los barcos están como a dos horas en coche sobre carreteras inestables construidas sobre la antigua cama del mar. El tiempo fue deprimente – nevando algunas veces y después unos 10 grados de máxima con fuertes vientos. ¡Exactamente lo que no necesitas! Sin embargo, el sol brilló por un par de horas cada día, y grabamos como si nuestras vidas dependieran de ello”.

Es extremadamente probable que Louder than words sea la última nueva canción de Pink Floyd que vaya a ser lanzada jamás. “No veo cómo podría ser de otra manera”, dice Gilmour. “Todo lo que tuviera valor está en The Endless River. Intentar hacerlo otra vez significaría usar el siguiente material de más calidad. Y ese no es suficientemente bueno para mí”.

(Fuente: Rolling Stone)

TAMBIÉN PUEDES VER: